Lago Escondido: el futuro de la causa en manos de la Cámara Federal de Comodoro Py
Camaristas deben resolver si apartan al fiscal Delgado y si la AFIP puede ser querellante e impulsar el caso tras confirmación de «facturas truchas».
La Cámara Federal tiene en sus manos resoluciones que serán clave para develar cuál será el futuro de la causa en la que se investiga el viaje de jueces federales, funcionarios porteños y agentes de inteligencia a Lago Escondido.
La causa tramita en los tribunales de Comodoro Py donde el juez Sebastián Ramos rechazó a la AFIP como querellante. El organismo pidió impulsar el caso al considerar que puede haber evasión impositiva y asociación ilícita fiscal.
Es que en estos días trascendió que las facturas que presentaron los “huemules”, tal como se definieron los jueces y protagonistas del viaje, serían apócrifas para simular que cada uno se pagó lo suyo. “La emisión de comprobantes apócrifos por medio de los sistemas de esta AFIP no puede resultarle ajeno al organismo. No sólo podemos vislumbrar una posible evasión fiscal, sino también una adulteración dolosa de registros y/o una asociación ilícita fiscal”, resume una presentación de la AFIP firmada por los abogados Sandra Valverde y Leandro Inglera Villa.
El juez Ramos rechazó a la AFIP como querellante y esa resolución fue apelada por el organismo. La definición está en manos de la Cámara Federal, la sala que integran Eduardo Farah, Roberto Boico y Martín Irurzun. Irurzun y Farah ya rechazaron la posibilidad de que el ministerio de Justicia sea querellante, en el marco de un pedido que había realizado el titular de esa cartera Martín Soria.
En la causa se denunció a funcionarios públicos (jueces federales, un entonces ministro de la Ciudad de Buenos Aires y un fiscal de la misma localidad), entre otros, por supuestamente haber aceptado determinados servicios de costo económico, ofrecidos por empresarios de medios en razón de los cargos que ejercían. Aquellos beneficios podrían haber estado vinculados a específicas intervenciones que tuvieron en casos puntuales ligados a los roles que poseen.
La Afip también pidió ser querellante: “Las conductas aparentemente realizadas por las contribuyentes Hidden Lake SA, y/o Servicios y Emprendimientos Aeronáuticos SA (la empresa de vuelos privados Flyzar, en la que viajó el contingente), resultan importantes indicios de ilícitos tributarios existiendo un perjuicio al fisco”, sostuvo el organismo.
En la documentación se habla de “inconsistencias en la facturación”. Y justamente en los chats de Telegram que se filtraron sobre aquel viaje se hablaba de la confección de facturas con fecha adulterada con la intención de justificar un gasto realizado varios días antes. Según la AFIP se detectó una fecha de emisión inserta en los mismos, “la cual no coincide con la detallada en el sistema como fecha de autorización de los comprobantes, es decir, fecha en la que se genera sistémicamente, siendo en todos los casos posterior”. “A partir de esas verificaciones, y teniendo en cuenta las inconsistencias observadas, resulta atendible considerar con cierto grado de probabilidad, que las facturas emitidas podrían resultar apócrifas y/o ideológicamente falsas, emitidas con fines espurios o al solo efecto de encubrir los ilícitos investigados u otros, que resulten conexos”, concluyó el organismo.
La Cámara Federal ya rechazó al ministro de justicia Martín Soria como querellante. También se rechazó al denunciante del caso, el abogado Marcelo Hertzriken Velasco. Solo queda por ahora el fiscal Federico Delgado para impulsar el ca so y también fue recusado por uno de los jueces que viajó a Lago Escondido, Pablo Yadarola. Delgado es quien sugirió al juez Ramos apartarse de la causa por su supuestos vínculos de amistad con el exministro porteño Marcelo D´Alessandro.
¿Qué dijo Yadarola para pedir el apartamiento de Delgado? “Es por lo menos una vergüenza, por calificar de algún modo su actuación. El fiscal promovió acusación penal sobre la base de prueba obtenida ilegalmente, lo cual viola todos los principios posibles de actuación del Ministerio Público Fiscal, en especial, el de objetividad”. Para Yadarola el caso fue impulsado solo por lo que “publicaron diversos medios de comunicación afines al gobierno”.
El juez Yadarola fue muy duro con el fiscal Delgado: “Si Aristóteles supiera que lo citan para fundar una acusación penal con fuente exclusiva en prueba falsa se iría de Atenas. El fiscal calificó los hechos como ‘corrupción’, cuando en virtud de la función desempeñada debería abstenerse de abrir la boca en la prensa e investigar objetivamente los hechos que no tienen nada de corrupción”. El magistrado Ramos a cargo del expediente, rechazó la recusación interpuesta por Yadarola contra el fiscal Delgado, pero ahora deberá resolver la Cámara.