Peregrinos del Hajj realizan rituales finales en La Meca antes de dirigirse a Mina

Los peregrinos ingresaron a la Gran Mezquita de La Meca el sábado para realizar sus rituales finales antes de dirigirse a Mina en preparación para el Hajj, el quinto pilar del Islam y una de las reuniones religiosas más grandes del mundo.

Recorrieron los patios de mármol blanco del lugar más sagrado del Islam para realizar el tawaf, el circuito a pie alrededor de la Kaaba, la estructura en forma de cubo cubierta con una tela negra bordada en oro, mientras sus fervientes recitaciones resonaban en el aire.

Las personas en la planta baja más cercana a la Kaaba se movieron debido a la gran cantidad de participantes. Los que estaban en los pisos superiores podían caminar más rápido, incluso correr. Los peregrinos levantaron las manos en súplica, se tomaron selfies o videos y llamaron a sus familiares mientras realizaban el tawaf.

Luego caminaron o corrieron entre dos colinas en una recreación de la búsqueda de agua de Agar para su hijo, Ismail, una historia que ocurre de diferentes formas en las tradiciones musulmana, cristiana y judía.

Los peregrinos deben entrar en un estado de pureza espiritual, conocido como ihram, para el Hajj.

Los hombres visten túnicas blancas sin costuras, una regla destinada a promover la unidad entre ricos y pobres. Las mujeres cubren su cuerpo y cabello.

Entre los rituales y las cinco oraciones diarias, que paralizan solemnemente el área, los peregrinos buscaban la sombra, comían bocadillos y acudían en masa a las numerosas tiendas y centros comerciales con aire acondicionado que rodean la Gran Mezquita para relajarse antes de los arduos días que se avecinaban.

Arabia Saudita ha restablecido la capacidad total de peregrinos para el Hajj de este año, luego de tres años de números drásticamente reducidos debido a la pandemia, y se espera que participen más de 2 millones de musulmanes.

“Creo que este año (la) multitud es demasiada”, dijo Mahboub Morshed, un ingeniero de software de 42 años de Bangladesh, refiriéndose a la menor asistencia de años anteriores. “Pero el gobierno y esta administración (Ministerio de Hajj y Umrah) están tratando de manejar esto sin problemas”.