Irán: Cambio geopolítico en Cáucaso abre paso a injerencia foránea
El jefe de seguridad nacional de Irán advierte que cualquier cambio geopolítico en el Cáucaso daría paso a la injerencia extranjera en los asuntos de la región.
“Las acciones que provocan cambios geopolíticos en la región, como las propuestas por otros en la cuestión del corredor Zangezur, no solo no ayudarán a los países de esta zona, sino que también abrirán el paso para la intervención de fuerzas más allá de la región y provocarán nuevas crisis en esta región estratégica”, dijo el miércoles el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, Ali Akbar Ahmadian, durante un encuentro con Jalaf Jalafov, representante especial del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliev en Teherán.
Tras la disolución de la autoproclamada república de Nagorno-Karabaj —un territorio históricamente perteneciente a Azerbaiyán, pero poblado mayormente por los armenios— ahora abunda la especulación de que Azerbaiyán podría recurrir a la fuerza para abrir un corredor que conecte el enclave azerbaiyano de Najicheván con el resto de Azerbaiyán continental a través de la provincia de Syunik, en el sur de Armenia.
Este corredor además permitiría conectar Azerbaiyán con uno de sus principales aliados, Turquía, pero supondría aislar a Armenia de su frontera con Irán.
“La República Islámica se opone firmemente a cualquier plan que conduzca a cambios geopolíticos en la región”, insistió Ahmadian, avisando que los cambios geopolíticos supondrían una amenaza para la paz y la seguridad del Cáucaso del sur.
Las dos partes también abogaron por resolver disputas y problemas regionales a través del diálogo entre los países de la zona y sin injerencia foránea.
El miércoles, Jalafov también se entrevistó con el canciller iraní, Hosein Amir Abdolahian, con quien discutió la situación de Nagorno-Karabaj, la región reintegrada por Bakú a finales de septiembre tras un ataque militar.
El jefe de la Diplomacia iraní hizo hincapié en la necesidad de iniciar un nuevo capítulo de cooperación regional para el establecimiento de la paz y el desarrollo económico en el Cáucaso tras solucionarse la disputa en Nagorno-Karabaj. “Creemos que de ahora en adelante debe reemplazar en esta región el lenguaje de la paz y la seguridad al de la tensión y el conflicto”, señaló Amir Abdolahian.
Jalafov, a su vez, pidió abrir un nuevo capítulo en las relaciones entre Bakú y Teherán, al tiempo que expresó el compromiso de su país con garantizar la libertad, los derechos y el bienestar de los armenios residentes en Karabaj.