Sin Evo Morales, llega a la capital de Bolivia la marcha opositora al Gobierno de Arce
Seguidores del expresidente Evo Morales llegaron a la capital boliviana para manifestarse contra la situación del país y el actual Gobierno. Dirigentes afines a la Administración de Arce consideraron que las últimas protestas de seguidores del expresidente generaron las actuales grandes pérdidas económicas a nivel nacional.
Simpatizantes del expresidente Evo Morales (2006-2019) realizaron nuevamente una marcha a la ciudad de La Paz, como en 2024. En esta oportunidad, los marchistas intentaron ingresar a la plaza Murillo, centro político del país, pero lo impidieron tres anillos de policías ubicados en las calles alrededor.
Los manifestantes, en menor número que la movilización de septiembre del año pasado, se quedaron en las calles adyacentes de la capital para esperar una respuesta a su pliego de peticiones, básicamente centradas en el rumbo de la economía nacional.
Morales, líder de los movilizados, no estuvo presente en la marcha porque pesa sobre él una orden de detención por el delito de trata de personas, basado en una supuesta relación que tuvo con una menor de edad en 2016, cuando era presidente de Bolivia.
“Acciones desestabilizadoras de Morales”
Este 14 de enero, Morales está citado a declarar en la ciudad de Tarija. En los últimos meses, el expresidente estuvo recluido en las poblaciones del trópico de Cochabamba (centro), donde su apoyo es mayoritario, para evitar roces con la Justicia boliviana.
A finales de 2024, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) determinó que Morales ya no sería reconocido como presidente del Movimiento Al Socialismo (MAS), cargo que ostentó en las últimas tres décadas. En su lugar asumió Grover García, un dirigente campesino de Cochabamba cercano al presidente Luis Arce.
Según los seguidores de Morales, el próximo 25 de enero anunciarán con qué sigla política —que no sea el MAS— se presentarán en las elecciones generales del 10 de agosto.
Días atrás, Arce aseguró que la nueva movilización evista tenía por objetivo hacer caer su Gobierno. Coincidentemente, en las declaraciones de los marchistas a los medios de comunicación locales, pedían la renuncia del presidente.
“Hay que hacer conocer al mundo entero que esta marcha es de carácter político. Busca la impunidad para una persona, Evo Morales. Hay un dicho que dice: ‘Quien nada debe, nada teme’. En la filosofía andina, una persona debe someterse a la Justicia y si no ha cometido delito, no debería temer a que la ley actúe como corresponde”, dijo a Sputnik Alexander Beltrán Crispín, referente del Pacto de Unidad del departamento de Oruro.
“Como organizaciones sociales, repudiamos las acciones desestabilizadoras del señor Morales. En este momento nos estamos reuniendo para tomar determinaciones que respondan a estas acciones”, agregó.
Inestabilidad económica
Para Beltrán, las recientes acciones del evismo contribuyeron a generar el actual panorama de inestabilidad económica. “Cuando se generan estas acciones netamente políticas, algunos sectores buscan especular con los precios de la canasta familiar”, comentó.
Desde la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) recordaron que en más de 40 días de bloqueo de grupos evistas en 2024 se perdieron más de 3.000 millones de dólares para empresarios privados y empresas públicas, como asociaciones productivas indígena campesina.
Además, se perdieron otros 1.200 millones en créditos internacionales para desarrollar obras públicas en el país.
“Son pérdidas económicas millonarias para el país. Así se genera un gran daño a la economía del Estado Plurinacional. Somos conscientes de esa situación, por eso la repudiamos”, dijo Beltrán.
Marcha contra el Gobierno
La reciente marcha evista partió de la ciudad de Patacamaya, a unos 100 kilómetros de la ciudad de La Paz, el pasado 10 de enero. Les tomó cuatro días llegar a su destino.
En septiembre pasado, una marcha similar había llegado a la capital boliviana. En ese momento, Morales dio un discurso junto a varios dirigentes seguidores y luego se disgregaron.
En la actual jornada asistió una cantidad mucho menor de simpatizantes de Morales en relación con la movilización de septiembre. Su objetivo fue ingresar a la plaza Murillo, sin embargo, la policía lo impidió.
El MAS se dividió a finales de 2023. Pero durante 30 años los actuales enfrentados fueron aliados.
“Pedimos a los hermanos movilizados tomar conciencia y reflexionar para estar más unidos hacia las elecciones de agosto. Tenemos que volver a ganar, porque somos el partido más grande en la historia de Bolivia”, dijo Beltrán.
Y agregó: “La unidad es el único camino, por tanto, les pedimos que tomen conciencia y evitemos la confrontación entre hermanos bolivianos”.
Para la llegada de la marcha evista a La Paz, concurrieron acciones de apoyo en varias ciudades del país. Las más notorias transcurrieron en la ciudad de Cochabamba, donde grupos afines a Morales enfrentaron a la policía para intentar recuperar la sede de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Cochabamba (FSUTCC).
En la localidad de Challapata, Oruro, francotiradores atacaron desde los cerros a buses que trasladaban policías, también a turistas que venían de visitar el salar de Uyuni. En estos casos resultaron heridos tres policías y dos civiles.