Brasil convoca a embajador de EE.UU. por deportaciones mientras conversaciones buscan definir términos
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil dijo que convocó el lunes a un alto diplomático estadounidense para discutir la deportación de inmigrantes brasileños, parte de un esfuerzo para buscar términos mutuamente aceptables para las controvertidas repatriaciones.
La citación se produce un día después de un importante estallido por las repatriaciones de migrantes desde Estados Unidos a Colombia.
Gabriel Escobar, actualmente el enviado estadounidense de más alto rango en Brasilia, se reunió el lunes con funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, mientras Estados Unidos intensifica las deportaciones bajo el gobierno del presidente Donald Trump, incluso en vuelos militares que transportan migrantes encadenados.
El sábado, el gobierno de Brasil dijo que pediría explicaciones a las autoridades estadounidenses sobre lo que llamó un “trato degradante” a los brasileños en un vuelo de deportación el viernes pasado.
Los deportados brasileños llegaron a Brasil esposados y describieron a los medios locales los malos tratos que sufrieron durante el vuelo, incluidos abusos físicos y negativas a permitirles ir al baño.
El Departamento de Estado de Estados Unidos no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Según la policía federal de Brasil, este fue el segundo vuelo este año desde Estados Unidos que transportaba inmigrantes indocumentados devueltos a Brasil y el primero desde que Trump asumió el cargo la semana pasada.
Una fuente diplomática brasileña dijo a Reuters que el gobierno del país sudamericano convocó a la reunión diplomática para abordar cuestiones relacionadas con el vuelo y agregó que tiene la intención de continuar las conversaciones con la Administración Trump para evitar más problemas.
El vuelo del viernes transportaba 88 brasileños y 16 agentes de seguridad estadounidenses, y originalmente estaba previsto que llegara a la ciudad de Belo Horizonte, en el sureste del estado de Minas Gerais.
Sin embargo, debido a problemas técnicos, el avión hizo una escala no programada en Manaus, la capital del estado de Amazonas, donde las autoridades brasileñas ordenaron retirar las esposas, según el gobierno. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva también designó un avión de la Fuerza Aérea Brasileña para completar el viaje de los migrantes.
El domingo, Trump y el presidente colombiano Gustavo Petro se alejaron del borde de una guerra comercial después de que la Casa Blanca dijera que la nación sudamericana acordó aceptar aviones militares que transporten migrantes deportados.
La fuente diplomática brasileña agregó que el gobierno brasileño no tiene la intención de rechazar la llegada de los vuelos de deportación estadounidenses.