Tras la disolución del EPAS, el gobierno de Mendoza reubicará a algunos de sus exempleados

El Gobierno de Mendoza anunció la disolución del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) y la reubicación de sus trabajadores.

De los 58 empleados, 28 continuarán sus funciones en Irrigación, AySAM y la Administración Central, mientras que los 30 restantes serán despedidos e indemnizados.

La decisión se enmarca en un plan de ajuste que busca generar un ahorro de aproximadamente 1.000 millones de pesos al año. El gobierno provincial argumentó que la reasignación de funciones a organismos ya existentes permitirá una gestión más eficiente de los recursos públicos.

Además del ahorro económico, la medida busca mejorar los controles en la prestación del servicio de agua y saneamiento en toda la provincia, incluyendo a los Prestadores de Gestión Comunitaria que atienden al 30% de la población.