Corte iraní dicta sentencias contra autores de un atentado terrorista
La Justicia iraní sentencia a la pena capital a tres autores de un atentado terrorista que causó en noviembre la muerte de tres fuerzas de seguridad.
Mohsen Hamidi junto a Esmail Cheraqi y Mohamad Hosein Karimi, fueron asesinados el 16 de noviembre durante una balacera desatada por hombres armados montados en motocicleta en la localidad de Malek Shahr, un suburbio de Isfahán, centro de Irán.
Tras el arresto de los autores del atentado y un seguimiento exhaustivo del caso, un tribunal iraní ha dictado este lunes un fallo preliminar, y sentenciado a muerte a los tres principales acusados del crimen.
Según el fallo, “Saleh Mirhashemi ha sido condenado a la pena capital por los cargos de librar una guerra contra Dios usando armas de fuego, formar y dirigir un grupo delincuente a fin de perturbar la seguridad del país, así como colaborar y conspirar para atentar contra la seguridad nacional”. La Corte ha dictaminado también 10 años de prisión contra el convicto por unirse y colaborar con el grupo terrorista Muyahedín Jalq (MKO, por sus siglas en inglés).
Mayid Kazedmi Sheij Shabani, y Said Yaqubi Kordsofla, el segundo y el tercer acusado del caso, respectivamente, han sido sentenciados a la pena de muerte por cargos de guerra contra Dios, y empleo de armas de fuego. Asimismo, han sido condenados a 10 años de cárcel por delitos de unirse a grupos ilegales con la intención de socavar la seguridad del país y colaborar y conspirar para atentar contra la seguridad nacional.
Otros dos acusados, identificados como Amir Nasr Azadani y Soheil Yahanguiri, han sido condenados a prisión (el primero a 26 y el segundo a 2 años) por el incidente.
El tribunal ha anunciado que todas las sentencias pueden ser apeladas ante la Corte Suprema de Irán, según ha informado la agencia de noticias Mizan, perteneciente al Poder Judicial.
El sangriento atentado del 16 de noviembre se produjo después de las convocatorias de los grupos antiraníes para generar disturbios en Irán tras la muerte de la joven iraní Mahsa Amini a mediados de septiembre en Teherán.
Las autoridades iraníes ven las huellas de Estados Unidos, Israel y varios Estados europeos en los recientes actos vandálicos y aseguran que actuarán con firmeza ante los que vulneran la seguridad de Irán.