EEUU mantiene su postura anti-Asad y insta a socios a NO normalizar
Tras acercamiento saudí-sirio, EE.UU. dice que su posición sobre normalización con Siria “no ha cambiado” e insta a otros a dejar de retomar lazos con Damasco.
“No nos normalizaremos con el régimen de Al-Asad y no alentaremos a otros a normalizarse en ausencia de un progreso real y duradero hacia una solución política en línea con la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad”, indicó el viernes un portavoz del Departamento de Estado estadounidense a la cadena televisiva Al-Hurra, con sede en EE.UU.
Al comentar informes sobre negociaciones entre Arabia Saudí y Siria para restablecer las relaciones diplomáticas, el diplomático estadounidense reiteró en que lo arriba aludido es un mensaje claro de Washington a sus socios que buscan tratar con Damasco.
Normalización saudí-siria, gran paso
Siria y Arabia Saudí acordaron reabrir sus embajadas después de romper nexos diplomáticos hace más de una década, en un movimiento que representaría un gran paso hacia delante en el regreso de Damasco al mundo árabe, informó el jueves la agencia de noticias británica Reuters, citando a tres fuentes bien informadas.
Una de las fuentes regionales confirmó que los contactos entre Riad y Damasco cobraron impulso tras un acuerdo histórico para restablecer las relaciones entre Arabia Saudí e Irán, el principal aliado del presidente sirio, Bashar al-Asad.
Otra fuente, aliada con Damasco expresó a Reuters que los dos países árabes se están “preparando para reabrir las embajadas después de Eid al-Fitr”, la festividad que marca el fin del ayuno musulmán del mes sagrado de Ramadán (20-21 de abril).
Emiratos Árabes Unidos (EAU), otro socio estratégico de Estados Unidos, avanzó todavía más en izar la bandera de la normalización con Al-Asad, y recientemente lo recibió en Abu Dhabi, capital emiratí, junto a su esposa.
Emiratos Árabes Unidos reabrió su embajada en Damasco en 2018 y dijo que los países árabes deberían involucrarse más en la búsqueda de una solución al conflicto sirio.
Aunque Al-Asad disfruta de contactos renovados con los países árabes que alguna vez lo boicotearon, las sanciones estadounidenses siguen siendo un obstáculo importante para los países que buscan expandir las relaciones comerciales con Damasco.