Entre viajes a Marte y un saludo nazi, Elon Musk se mostró entusiasmado ante el comienzo de la segunda de Trump

El dueño de Tesla, SpaceX y X, que será una suerte de Federico Sturzenegger yanqui en términos gubernamentales, se mostró eufórico en su discurso en el Capital One Center.

El flamante ministro del Gabinete nortemaricano, Elon Musk, dueño de Tesla, SpaceX y X, no desaprovechó la oportunidad de mostrar su entusiasmo tras la jura de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos por segunda vez. Durante su discurso de investidura, Trump dejó claro uno de sus grandes objetivos: enviar astronautas a Marte. “Llevaremos nuestra bandera a horizontes nuevos y bonitos. Vamos a llegar a las estrellas, lanzando a los astronautas de nuestro país para que la bandera de las barras y las estrellas ondee sobre Marte”, aseguró el presidente en su primer mensaje. La respuesta inmediata de Musk no se hizo esperar, quien expresó su apoyo con un gesto de pulgares arriba, consolidando su cercanía con el mandatario.

En una presentación posterior en el Capital One Center, Musk reiteró su entusiasmo por la misión marciana. “¡Llevaremos a DOGE [sigla del Departamento de Eficiencia Gubernamental] a Marte! ¿Se imaginan lo maravilloso que será que astronautas estadounidenses planten la bandera en otro planeta por primera vez? ¡Qué inspirador sería!”, exclamó mientras realizaba un simulacro de plantado de banderas. La ovación del público no se hizo esperar, reflejando el apoyo que el multimillonario encuentra entre los asistentes a los eventos de Trump. Musk detalló además que las primeras naves hacia Marte serían lanzadas en los próximos dos años, con la posibilidad de vuelos tripulados a partir de cuatro años si los aterrizajes salen bien.

Sin embargo, el evento no estuvo exento de polémicas. Al finalizar su intervención, Musk realizó un gesto con el brazo que muchos interpretaron como un saludo nazi, una imagen que rápidamente se viralizó en redes sociales. “¡Gracias! Mi corazón está con ustedes”, dijo Musk en ese momento, pero la controversia sobre el gesto no tardó en invadir los comentarios online. Numerosos usuarios señalaron la similitud con el saludo fascista asociado al régimen nazi, lo que desató una ola de críticas y especulaciones sobre las intenciones del magnate.

La relación de Musk con Trump es de larga data y está marcada por una serie de gestos de apoyo. El empresario no solo ha donado cantidades millonarias a las campañas del presidente, sino que también fue designado para liderar el panel presidencial de Eficiencia Gubernamental.