FBI sigue espionajes “regulares” a comunicaciones de ciudadanos
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) mantiene espionajes “regulares” a comunicaciones de estadounidenses, asegura un tribunal estadounidense.
Bajo el argumento de la “lucha contra amenazas extranjeras”, el FBI ha mantenido el uso de programas de vigilancia masiva contra ciudadanos estadounidenses en los últimos años, según documentos judiciales.
Un programa de vigilancia para luchar contra amenazas extranjeras fue utilizado masivamente contra ciudadanos estadounidenses en los últimos años por parte de la policía federal, según documentos judiciales publicados el viernes.
Según los archivos, el FBI tuvo acceso durante más de 278 000 veces, a menudo y sin justificación alguna, a una base de datos restringida, de acuerdo con documentos desclasificados de la corte a cargo de supervisar actividades de espionaje llamada Tribunal de Inteligencia de Vigilancia Extranjera.
Las consultas hechas de forma inapropiada por la policía federal se centran en mayor medida sobre personas detenidas en las grandes manifestaciones antirracistas en 2020, víctimas de crímenes, o acusados de haber hecho parte de los asaltos al Capitolio el 6 de enero de 2021, de acuerdo con los textos judiciales.
los agentes federales también habrían accedido a una base de datos que tenía como objetivo recabar información sobre las comunicaciones personas extranjeras (sin la misma protección jurídica que los estadounidenses), en medio de la supuesta lucha contra el terrorismo o cualquier amenaza extranjera, que pusiera aparente peligro la seguridad nacional estadounidense.
No es la primera vez que algo similar ocurre, en el pasado, la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), a cargo de recopilar correos electrónicos, mensajes de texto, fotos, videos y otros documentos había reconocido que datos sobre estadounidenses también fueron recolectados indirectamente o de forma inadvertida.
Ahora, las autoridades manejan el pretexto de tener derecho de servirse de estas informaciones para reunir datos sobre amenazas extranjeras o pruebas criminales, pero según el tribunal han excedido esta función.
En febrero de 2022 y luego de filtraciones a medios de comunicación, el Buró Federal de Investigaciones reconoció en una carta enviada al diario británico The Guardian, que compró servicios de NSO Group, la tecnología de origen israelí detrás de Pegasus, el software espía que permite monitorear y vigilar teléfonos inteligentes a distancia y que ha sido implementado por varios gobiernos alrededor del planeta para espiar a otros mandatarios, lídres políticos, activistas y periodistas.