Gil Pereg juega las últimas fichas en la Corte nacional y aún no lo trasladan a la cárcel
El israelí, condenado a prisión perpetua por el doble asesinato de su madre y de su tía hace más de cuatro años, buscará avanzar a la próxima instancia judicial para revertir el fallo que en Mendoza quedó firme.
Mientras la Justicia y el Servicio Penitenciario tironean para definir el lugar de encarcelamiento de Gil Pereg, el israelí condenado por el doble crimen de su madre y de su tía, ocurridos hace más de cuatro años, se juega sus últimas fichas en buscar de revertir la pena de prisión perpetua que pesa en su contra.
Desde aquel 25 de enero de 2019 en que Gil Pereg fue detenido por los asesinatos de Phyria Saroussy (63) y Lily Pereg (54), no ha parado de recibir reveses judiciales. La Justicia confirmó que debía enfrentar un juicio, el debate se realizó en 2021, fue condenado a prisión perpetua y, por último, el 14 de marzo pasado esa pena quedó firme a nivel provincial.
Los abogados defensores del israelí, Maximiliano Legrand y Lautaro Brachetta, recurrieron a la Suprema Corte de Justicia planteando cuatro agravios: que el caso debía juzgarse en el fuero federal, que el jurado no tuvo paridad de género como indica la ley -faltaron miembros no binarios-, que el jurado era incapaz de definir cuestiones psicológicas de su cliente y que no tuvieron en cuenta su situación de discapacidad.
El traspié de Gil Pereg en la Corte mendocina
Estos planteos, casi todos argumentados en una supuesta insania mental de Gil Pereg, fueron rechazados por la Corte provincial que terminó confirmando la sentencia.
Ante ese panorama, los letrados presentaron el jueves pasado un recurso extraordinario federal, es decir, solicitaron que la Corte nacional revise el fallo. Pero antes de que el expediente viaje a Buenos Aires es la Corte provincial quien debe habilitar la vía recursiva.
En caso de recibir una negativa nuevamente, Gil Pereg tendrá su última bala con un recurso de queja directo ante la Corte de la Nación. Si vuelve a fallar, la condena a prisión perpetua quedará definitivamente firme.
Un momento del juicio a Gil Pereg, que fue declarado culpable por un jurado popular y luego condenado a perpetua.
El lugar de alojamiento de Gil Pereg
El otro movimiento constante que presenta el expediente son los pedidos constantes de la Justicia para trasladar a Gil Pereg a la penitenciaría provincial. Desde hace varios meses que está alojado en el Hospital El Sauce, pese a que los psicólogos y psiquiatras determinaron hace tiempo que ya está de alta y puede continuar el tratamiento en una cárcel. Sin embargo, para estar en el penal debe reunirse ciertos criterios de seguridad, entre ellos, que no tenga contacto con el resto de la población carcelaria.
Ante este panorama, el jefe de la Unidad Fiscal de Homicidios Fernando Guzzo ha solicitado en reiteradas ocasiones informes para que finalmente Gil Pereg quede alojado en la cárcel de Cacheuta. La última respuestas del Servicio Penitenciario -a través del Ministerio de Seguridad- fue que “actualmente no tienen previsto tener pabellones psiquiátricos en ninguno de los establecimientos provinciales”, pese a que las autoridades judiciales creían que se estaba construyendo uno en el complejo Almafuerte II. Es decir, mientras tanto Gil Pereg continuará alojado en su celda solitaria ubicada en el Hospital El Sauce.
El doble crimen de las israelíes en Guaymallén
Phyria Sarouss y y Lily Pereg llegaron a Mendoza el 11 de enero de 2019 para visitar al hijo de Sarussi, Nicolás Gil Pereg -así se hacía llamar-, quien vive en la provincia desde hace diez años aproximadamente.
Al día siguiente se reunieron con el hombre y los tres fueron juntos hasta el lugar donde vivía en condiciones de poca higiene: un predio ubicado frente al cementerio de Guaymallén. Desde ese momento, no fueron vistas nunca más.
La madre y la tía, víctimas fatales de Gil Pereg en su casa de Guaymallén.
Gil Pereg fue quien radicó la denuncia por el paradero pero rápidamente se convirtió en sospechoso por su extraño modo de vida -vivía como un marginal pero tenía 3 millones de pesos en efectivo dentro de una bolsa de supermercado-, aunque nunca se pudo encontrar pruebas para vincularlo.
La Justicia investigó el caso como una averiguación de paradero hasta el 25 de enero cuando un cotejo con una mancha hallada en su domicilio determinó que era sangre de su tía. Esa misma jornada fue detenido y al día siguiente se encontraron los cuerpos.
Lily Pereg, quien era docente de microbiología en Australia, fue ultimada de tres disparos. En tanto que la madre del acusado fue estrangulada. Ambas fueron empaladas con un hierro de construcción cuando ya estaban sin vida.