Irán fustiga “falso” apoyo de Biden a mujeres del pueblo persa

Irán repudia la “hipocresía” del presidente de EE.UU. que alega apoyar a las mujeres iraníes y al mismo tiempo mantiene las sanciones contra la nación iraní.

“La falsa alegación de apoyar a las mujeres iraníes y al mismo tiempo mantener e intensificar las crueles sanciones contra la nación iraní es una muestra de hipocresía y enemistad del régimen de Estados Unidos y sus líderes antiraníes”, subrayó este martes el portavoz de la Cancillería de Irán, Naser Kanani, en su cuenta en Twitter.

El presidente estadounidense, Joe Biden, utilizó el lunes un evento en la Casa Blanca para conmemorar el Año Nuevo persa, conocido como Noruz, para interferir otra vez en los asuntos internos de Irán. Durante la ceremonia, alegó que apoya a las mujeres iraníes, y prometió mantener la presión sobre Teherán.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní recalcó que “la enemistad con el sistema de la República Islámica y el pueblo de Irán constituye una parte invariable de la política exterior del régimen estadounidense”, algo que cada año también se refleja en el mensaje que emiten los funcionarios norteamericanos por Noruz.

De este modo, Biden expresó su apoyo a los alborotadores que causaron disturbios con el apoyo de Occidente en Irán bajo el pretexto de la falsa defensa de los derechos y la condición de las mujeres después de la muerte repentina de la joven iraní Mahsa Amini, de 22 años, bajo la custodia policial, en septiembre pasado.

Desde que estallaron los disturbios tras la muerte de Mahsa Amini, Occidente aumentó acusaciones contra la República Islámica de haber violado los derechos de la mujer.

De hecho, el mensaje del inquilino de la Casa Blanca es otro intento para apoyar los disturbios en Irán, los cuales, según las autoridades iraníes, han sido diseñados por Estados Unidos, el régimen israelí y sus secuaces, para generar inseguridad en el país persa.

Irán, no obstante, denuncia que los países occidentales buscan crear un falso estereotipo de defensores y redentores de la mujer, y acusa a Occidente de hipocresía por alegar defender los derechos de las mujeres, mientras que la historia registra los crímenes cometidos contra ellas.