La poderosa Pan American Silver se quedó con la mina de oro Don Sixto, en Malargüe
La transacción finalizó en las últimas horas y se cree que el yacimiento puede generar un importante movimiento en el sur de Mendoza. Los antecedentes fallidos para transferirla y qué puede implicar para la provincia.
Don Sixto es una prometedora mina de oro en Mendoza que no se explota en absoluto. Este lunes fue formalmente comprada por un gigante a nivel mundial: la Pan American Silver, que la adquirió en un paquete de yacimientos antes pertenecientes a otra firma, Yamana Gold. Aunque cambió de manos e integró una transacción de miles de millones de dólares, continuará inactiva.
La compra fue confirmada en las últimas horas: con mil millones de dólares pagados en efectivo, más 37,1 millones en acciones de dos empresas distintas (la Agnico Eagle y la propia Pan American), se saldó el traspaso de todos los proyectos que Yamana tenía en la región, y por lo tanto en la Argentina, lo que incluye sus derechos sobre el sur de la provincia.
Esto implica que, de darse los pasos legales correspondientes y respetando la normativa ambiental, podrían hacerse los estudios para determinar cuál es el potencial que vive bajo el suelo malargüino, o al menos ratificar los estudios que se han hecho en años anteriores, para saber si efectivamente puede sacársele provecho.
Antes de eso, habrá un relevamiento interno de los nuevos dueños, que analizarán el horizonte económico de la firma, con estudios que recién estarían listos en el segundo trimestre del año. Sin embargo, se espera que en las próximas horas haya un documento final del intercambio con varios de esos detalles.
Se desconoce si habrá información específica sobre el yacimiento que queda entre Malargüe y San Rafael, sólo trascendió que el material llevará el nombre de “Pan American & Yamana Gold Transaction” y que estará subido en el portal oficial de la primera.
Las compras frustradas de la mina Don Sixto
“(Lo que ocurrió) hoy marca el final de un viaje verdaderamente notable para todos nosotros en Yamana Gold, mientras nos preparamos para nuestra adquisición por parte de Pan American Silver Corp”, dijo Michael Steinmann, presidente y director ejecutivo de la minera absorbida. Sin embargo, el acuerdo estuvo a punto de hacerse con otro privado: la sudafricana Gold Fields. A finales de 2022, ese acuerdo naufragó.
La venta iba a hacerse por 6.500 millones de dólares y en su momento se dijo -incluso en medios especializados de distintos países- que ya estaba cerrado el contrato. Sin embargo, a días de que tuviera que oficializarse en el Tribunal de Justicia de Ontario, Canadá, comenzaron los rumores de que las partes se habían echado atrás y que los africanos deberían pagar U$S 300 millones por la rescisión del arreglo. Esta vez ese paso legal sí se llevó a cabo, y de hecho cambiaron las cotizaciones bursátiles de Yamana.
Ojeda quiso zonificar la minería en Mendoza, pero el Ejecutivo le cerró los caminos legislativos.
Sin embargo, antes de eso la compra también tuvo otros destinos posibles. Según diversas fuentes, tanto académicas como del oficialismo, hubo otra empresa interesada y cuyo CEO llegó a reunirse con el gobernador Rodolfo Suarez: Patagonia Gold.
De acuerdo a lo que contaron a este diario, su jefe ejecutivo Carlos Miguens (que es el hijo de la reconocida directora de cine María Luisa Bemberg) habría estado en Mendoza durante los primeros meses del año pasado y allí habría mantenido encuentros con el intendente Juan Manuel Ojeda y -a través suyo- también con miembros del Gobierno.
La historia de Don Sixto
Su potencial fue descubierto en 1996, cuando aún tenía otro nombre: “La Cabeza”. Está enclavada 180 kilómetros al oeste de la villa cabecera del departamento y se estima que tiene una capacidad de 1.3 millones de onzas de oro (65% de la producción anual esperada en todo el mundo). Esos números llamaron la atención de varias multinacionales, aunque finalmente la primera en quedárselo fue Exeter Resource Corporation -otra canadiense-, en el año 2000.
Don Sixto está próximo a dos de las ciudades que más han reclamado contra de su utilización: General Alvear y la ciudad de Santa Isabel, en el departamento pampeano de Chalileo.
Exeter se quedó con el yacimiento y luego lo manejó a través de su firma local Extorre, que fue la encargada de ampliar los márgenes de la mina a través de la compra de una finca llamada “El Pantanito”. Con esa transacción, el espacio utilizable alcanzó las 8.000 hectáreas y más tarde pasó a su denominación actual: “Don Sixto”, en honor a un puestero que vivió durante varias décadas en la zona.
Yamana la adquirió en 2011, cuatro años después de que se sancionara la ley 7.722. Durante más de una década mantuvo la expectativa de que hubiese cambios en esa regulación, para poder trabajar como lo hizo en Gualcamayo (Jáchal) y como aún lo hace en los proyectos Mara (Catamarca) y Cerro Negro (al norte de Santa Cruz). Ahora, estos emprendimientos -incluido el mendocino- son parte de la nueva corporación con sede en Vancouver.
“Es importantísima para nuestra comuna. Una de las grandes perspectivas y donde hemos puesto nuestros sueños muchos malargüinos”, había asegurado el intendente Juan Manuel Ojeda en un video grabado en 2020. Hace 15 años que está paralizada.