Los padres de Fernando Báez Sosa no creen en las disculpas de los rugbiers: «Lloran por lo que les espera, no por lo que hicieron»

Tras las disculpas de los rugbiers, los padres de Fernando Báez Sosa no les creen que sean sinceras.

Las jornadas de alegatos en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa terminaron. Primero fue el turno de la querella y la fiscalía, mientras que hoy, 26 de enero, fue el turno de la defensa de los rugbiers a cargo de Hugo Tomei. El abogado pidió la absolución de todos sus clientes por el asesinato ocurrido en Villa Gesell y, previo a que termine la audiencia, todos pidieron disculpas.

Uno por uno se pararon y pidieron disculpas a los padres de Fernando Báez Sosa y a sus propias familias. Sin embargo, Silvino Báez y Graciela Sosa no les creen a los agresores y consideran que todo es ficticio. «Lloran por lo que les espera, no por lo que hicieron«, afirmaron en conjunto al salir de los tribunales de Dolores ambas personas en C5N.

«Parecían estudiados porque todos decían las mismas cosas. Ni si quiera me miraron a la cara cuando hablaron. No sentí que fueran sinceros con sus palabras», expresó la madre. En este mismo sentido, la mujer reiteró su pedido de justicia «para que pueda haber un poco de paz en nuestro corazón y que nuestro hijo pueda descansar en paz. Trataremos de hacer nuestro duelo que todavía no lo pudimos hacer».

Por otro lado, el padre de la víctima definió como «actuado» el pedido de disculpas de los agresores. «No les creo. Es muy fuerte que maten a tu hijo y después vengan a pedir perdón. No les veo sinceridad», aseveró Silvino Báez. Con este descargo, consideró que los acusados «quisieron modificar su situación» judicial, aunque eso no evitará que se haga justicia.

Los padres de Fernando Báez Sosa esperan la condena
Por otro lado, la madre de Fernando Báez Sosa reiteró su pedido de «perpetua para todos, para que no vuelva a ocurrir, que no haya otro Fernando y que paguen con la pena máxima, que cumplan como se debe». A pesar de esto, la mujer consideró que «el dolor toda la vida va a ser igual. Los primeros momentos fueron muy duros, ahora estamos con más seguridad y más fuertes».