Miles de personas protestan frente al Tribunal Supremo de Rumania por la cancelación de las elecciones presidenciales

Miles de rumanos se manifestaron el viernes frente al máximo tribunal del país para protestar contra la cancelación de las elecciones presidenciales de diciembre en las que un candidato prorruso poco conocido ganó la primera vuelta.
Aunque pequeñas, las protestas han continuado desde el 6 de diciembre, cuando el Tribunal Constitucional anuló las elecciones dos días antes de la segunda vuelta. La decisión se produjo después de que documentos estatales demostraran que el favorito Calin Georgescu se había beneficiado de una campaña injusta en las redes sociales probablemente orquestada por Rusia.

Moscú negó cualquier interferencia en las elecciones de Rumania.
La decisión de cancelar las elecciones presidenciales debilitó aún más la confianza pública en las instituciones estatales, polarizó a los votantes enojados por las luchas políticas internas y las acusaciones de corrupción en los partidos tradicionales y fortaleció a los partidos de extrema derecha y ultranacionalistas, que ahora poseen más de un tercio de los escaños parlamentarios.
El abogado de Georgescu presentó el viernes una petición al Tribunal Constitucional para que se restablezca el resultado de las elecciones. Georgescu, que no estaba presente, instó a sus partidarios a sumarse a la petición.

Alrededor de 4.000 partidarios se reunieron fuera del tribunal con un ataúd simulado blasonado con la palabra “Democracia”.
Ondearon banderas nacionales, llevaron iconos cristianos y fotos de Georgescu y corearon “Queremos votar” y “Que vuelva la segunda vuelta”.
La coalición gobernante de Rumania acordó esta semana repetir las elecciones presidenciales de dos vueltas el 4 y el 18 de mayo, casi seis meses después de la votación cancelada.

El presidente saliente Klaus Iohannis, cuyo mandato expiró el 21 de diciembre, permanecerá como jefe de Estado hasta que se elija a su sucesor.
Aún no está claro si a Georgescu, que es crítico con la OTAN y se opone al apoyo rumano a Ucrania contra la invasión rusa, se le permitirá presentarse nuevamente a la presidencia.
Rumania tiene la frontera terrestre más larga con Ucrania de todos los estados miembros de la Unión Europea y la OTAN. Ha ayudado a exportar millones de toneladas de grano ucraniano a través de su puerto de Constanza en el Mar Negro, ha entrenado a pilotos de combate ucranianos y ha donado una batería de defensa aérea Patriot a Kiev.