Millones de iraníes marchan en el Día Mundial de Al-Quds
Millones de iraníes han salido este viernes a las calles para participar en las masivas marchas por el Día Mundial de Al-Quds en rechazo a la ocupación israelí.
Las multitudinarias movilizaciones en defensa de Palestina y su causa han arrancado en Teherán, la capital, y otras 1000 ciudades del país entre gritos de “Muerte a Israel” y “Muerte a Estados Unidos”.
Los participantes ondean banderas nacionales de Palestina y de Irán, y portan pancartas con mensajes que condenan la ocupación israelí del territorio palestino y la profanación israelí de la sagrada Mezquita Al-Aqsa, entre otras frases que, vaticinan el inminente colapso de Israel.
Entre los manifestantes, hay personas que sostienen carteles con imágenes de la explanada de la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén), con una frase en árabe que significa “Al-Quds es nuestra”, lo que muestra la importancia de esta urbe para el mundo musulmán y su promesa inquebrantable para liberarla.
Más de 4000 periodistas, camarógrafos o fotógrafos, entre ellos unos 150 corresponsales de los medios extranjeros, darán cobertura mediática a los eventos en todo el país.
Las marchas concluirán con el rezo colectivo del viernes, donde los oradores reafirmarán el apoyo firme de la República Islámica a la nación y Resistencia palestinas y condenarán las brutales agresiones llevadas a cabo recientemente contra los palestinos y las santidades islámicas.
El jueves, los tres Poderes del país y todas las ramas de las Fuerzas Armadas hicieron llamamientos a toda la nación iraní a participar en las marchas del Día de Al-Quds y auguraron el inminente colapso del régimen de Israel, que está inmersa en una profunda crisis sociopolítica y se queda más aislado que nunca a nivel internacional.
El Día Mundial de Al-Quds es un recuerdo del Imam Jomeini, fundador de la República Islámica de Irán (la paz sea con él), quien en agosto de 1979 declaró el último viernes de cada mes de Ramadán —el mes sagrado y de ayuno musulmán— como una fecha para dedicarse, en especial, a la liberación de Palestina y de la ciudad de Al-Quds (Jerusalén). El evento es además el día del despertar y de la unidad de todos los musulmanes.