Régimen de Cuba premia año de “calamidad” con feriados el 3 y 4 de enero; la crisis se agudiza
Los cubanos despiden el 2024 con severos apagones, crisis de insumos médicos, déficit de transporte y escasez de alimentos.
En medio del cierre del año, el régimen de Miguel Díaz-Canel, decidió “premiar” lo que denomina “resistencia cubana” y para ese fin declaró como feriados el 2 y el 3 de enero del 2025. Una medida que, lejos de solventar alguna de las calamidades vividas, aumenta la incertidumbre en el que viven los cubanos.
El 2024 será recordado como un año en el que los cubanos debieron soportar el azote más férreo de la dictadura, además del paso de dos huracanes cuyos daños materiales aún no tienen reparo. A lo anterior se suma la constante represión, hambruna, poco acceso al derecho a la salud, encarcelamientos, violaciones constantes a los derechos humanos, y los constantes apagones. Los ciudadanos del país insular pasaron semanas sin el servicio eléctrico.
Se trata, de un reconocimiento “al esfuerzo realizado por el pueblo en este difícil 2024”, según el diputado José Amado Ricardo Guerra durante el último día del Cuarto Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
El funcionario del castrismo precisó que la decisión se tomó por el “desvelo” con que ha enfrentado el pueblo “situaciones adversas”, demostrando “su capacidad de resistencia cumpliendo con extraordinaria dedicación y esfuerzo las tareas”, reseña el portal web CubaNet.
Según su afirmación, el Primer Ministro Manuel Marrero aprobó el 19 de diciembre el decreto ley 118, que formaliza el receso laboral con pago de salario para los días viernes 3 y sábado 4 de enero de 2025.
De este modo, esos días se suman a los festivos ya establecidos el 1ro y 2 de enero, extendiendo el período de inactividad laboral por cuatro días.
Cuba vive a oscuras
Aunque el régimen ahora “premia” a los trabajadores aumentando los días que percibirán salario sin respaldo productivo, los cubanos despiden el 2024 con severos apagones, crisis de insumos médicos, déficit de transporte y escasez de alimentos.
El propio dictador cubano, Miguel Díaz-Canel, reconoció este viernes que 2024 ha sido “uno de los años más difíciles” para la Isla, con “enormes esfuerzos e insuficientes resultados” frente a la profunda crisis económica y energética que atraviesa el país.
En la última sesión del cuarto período ordinario de la Asamblea Nacional del Poder Popular, destacó que esta situación representa su “principal insatisfacción” y la sometió a una “profunda y severa autocrítica”. Como es su costumbre, aseguró que la causa principal del deterioro es la “guerra económica” impuesta por las sanciones estadounidenses.
También advirtió que su régimen se prepara para un segundo mandato del presidente Donald Trump: “Nos mantendremos alerta, pero sin miedo”, afirmó. Además, dijo que La Habana está dispuesta a “dialogar y desarrollar relaciones de respeto en pie de igualdad” con Washington.
Aumento de la represión en Cuba
La organización no gubernamental Prisoners Defenders registró en su más reciente informe que al cierre de noviembre de 2024 en Cuba había 1.148 presos políticos, 34 más que el mes anterior.
En su parte mensual, la ONG con sede en Madrid destacó las nuevas detenciones son solo “la punta del iceberg de la represión en Cuba”.
“En los últimos 12 meses la lista de presos políticos de Cuba sumó un total de 155 nuevos presos políticos (un promedio de 13 nuevos cada mes). En ese período estuvieron presentes en la lista un total de 1.213 prisioneros políticos, todos ellos torturados de forma escatológica sin que aún haya reacciones internacionales que lo impidan”, subraya el texto, reseña el portal web CubaNet.
Asimismo, la organización señala que la Isla ha totalizado 1.785 presos políticos presentes en sus cárceles desde el 1 de julio de 2021 hasta final del mes de noviembre pasado, en apenas 3 años y cinco meses. De ese total unos 650 de los actuales presos sufren patologías médicas causadas y/o agravadas fruto del maltrato.
La respuesta del régimen cubano a las masivas y espontáneas movilizaciones desarrolladas a lo largo de toda la Isla para, mayoritariamente, reclamar servicios básicos se ha concretado en 30 de los 34 nuevos presos políticos en noviembre en Cuba, advierte Prisoners Defenders.