Xi de China realiza primera visita a Moscú mientras Putin libra guerra en Ucrania

El líder chino, Xi Jinping, llegó a Moscú el lunes en una visita de tres días que muestra la nueva arrogancia diplomática de Beijing y ofrece un bienvenido impulso político para el presidente ruso, Vladimir Putin, a medida que los combates en Ucrania se reducen a una guerra de desgaste .

China y Rusia han descrito el viaje de Xi como parte de los esfuerzos para profundizar aún más su “amistad sin límites”. China mira a Rusia como una fuente de petróleo y gas para su economía hambrienta de energía, y como un socio para oponerse a lo que ambos ven como el dominio estadounidense de los asuntos globales.

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que durante la cena del lunes, Putin y Xi tocarán temas relacionados con Ucrania y agregó que el presidente de Rusia probablemente ofrecerá una “explicación detallada” de la opinión de Moscú sobre la situación actual.

Para el martes están programadas conversaciones más amplias que involucran a funcionarios de ambos países sobre una variedad de temas, según Peskov.

Para Putin, la presencia de Xi en el Kremlin es una visita de prestigio y un triunfo diplomático, que le permite decirles a los líderes occidentales aliados con Ucrania que sus esfuerzos por aislarlo no han sido suficientes. El viaje de Xi se produce pocos días después de que la Corte Penal Internacional de La Haya anunciara que quiere llevar a juicio a Putin por los secuestros de miles de niños de Ucrania.

China presenta la visita de Xi como parte de los intercambios diplomáticos normales y ha ofrecido pocos detalles sobre lo que pretende lograr el viaje, aunque los casi 13 meses de guerra en Ucrania ensombrecen las conversaciones.

En una sesión informativa diaria en Beijing el lunes, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin, dijo que el viaje de Xi fue un “viaje de amistad, cooperación y paz”.

Sobre la guerra, Wang dijo: “China mantendrá su posición objetiva y justa sobre la crisis de Ucrania y desempeñará un papel constructivo en la promoción de las conversaciones de paz”.

El salto de Beijing a los asuntos de Ucrania sigue a su reciente éxito en la intermediación de conversaciones entre Irán y su principal rival en Oriente Medio, Arabia Saudita, que acordó restablecer sus lazos diplomáticos después de años de tensiones.

Entusiasmado con ese éxito, Xi pidió a China que desempeñe un papel más importante en la gestión de los asuntos globales.

“El presidente Xi tendrá un profundo intercambio de puntos de vista con el presidente Putin sobre las relaciones bilaterales y los principales asuntos internacionales y regionales de interés común”, dijo Wang.

Agregó que Xi tiene como objetivo “promover la coordinación estratégica y la cooperación práctica entre los dos países e inyectar un nuevo impulso al desarrollo de las relaciones bilaterales”.

China pidió el mes pasado un alto el fuego y conversaciones de paz entre Kiev y Moscú. El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy acogió con cautela la participación de Beijing, pero la propuesta fracasó.

El Kremlin dio la bienvenida al plan de paz de China y dijo que se discutiría en las conversaciones entre Putin y Xi que comenzarán durante la cena.

Washington rechazó enérgicamente el llamado de Beijing a un alto el fuego como la ratificación efectiva de las ganancias del campo de batalla del Kremlin.

Funcionarios de Kiev dicen que no se doblegarán en sus términos para un acuerdo de paz.

“El primer y principal punto es la capitulación o retirada de las tropas de ocupación rusas del territorio de Ucrania de acuerdo con las normas del derecho internacional y la Carta de la ONU”, tuiteó Oleksiy Danilov, secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania. Lunes.

Eso significa restaurar “la soberanía, la independencia y la integridad territorial”, escribió.

El viaje de Xi a Rusia se produce después de que la Corte Penal Internacional emitiera el viernes una orden de arresto contra Putin por cargos de crímenes de guerra.

El Kremlin no reconoce la autoridad de la Corte Penal Internacional y ha rechazado su movimiento contra Putin como “legalmente nulo y sin valor”. China, Estados Unidos y Ucrania tampoco reconocen a la CPI, pero el anuncio de la corte empaña la posición internacional de Putin.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China pidió el lunes a la CPI que “respete la inmunidad jurisdiccional” de un jefe de Estado y “evite la politización y el doble rasero”.

Dmitry Medvedev, subjefe del Consejo de Seguridad de Rusia, dijo el lunes que la decisión de la Corte Penal Internacional de emitir una orden de arresto contra Putin tendrá “consecuencias monstruosas” para el derecho internacional.

“Se acerca un sombrío ocaso de todo el sistema de relaciones internacionales, la confianza está agotada”, escribió Medvedev en el canal de su aplicación de mensajería.

Argumentó que en el pasado la CPI ha destruido su credibilidad al no procesar los supuestos crímenes de guerra estadounidenses en Afganistán e Irak.

También advirtió que el tribunal de La Haya podría ser el objetivo de un ataque con misiles rusos. Medvedev ha hecho declaraciones y afirmaciones grandilocuentes en el pasado.