YPF cerró la venta de áreas petroleras en Mendoza: ahora la Provincia tiene que confirmar la operación

La compañía petrolera cedió las operaciones en Mendoza Norte y Llancanelo. Dos empresas se harán cargo. Pero todavía el Gobierno de Alfredo Cornejo tiene que validar el traspaso.

YPF anunció en la noche de este lunes que logró los primeros seis acuerdos para la venta de 15 áreas de hidrocarburos convencionales en varias provincias, entre ellas, Mendoza. Se trata del Proyecto Andes, que en la provincia cuenta con 14 áreas de extracción de las que la petrolera estatal decidió desprenderse y que genera expectativas en el Gobierno provincial. Dos empresas se harán cargo de esos pozos, cuando las operaciones financieras estén confirmadas.

El comunicado oficial indicó que se finalizó el proceso de “due dilligence” en los plazos establecidos para el traspaso de esas áreas petroleras que están agrupadas en seis clústeres en Río Negro, Neuquén y Chubut, además de Mendoza.

En lo que corresponde a la provincia, YPF cerró la operación del clúster Mendoza Norte con la empresa Petróleos Sudamericanos. Y dos áreas de Llancanelo con la firma PCR –Petroquímica Comodoro Rivadavia–.

Mendoza Norte está ubicado sobre la cuenca cuyana, que agrupa a los bloques Barrancas, Río Tunuyán, Ceferino, Mesa Verde, La Ventana y Vizcacheras. La producción total es de 11.725 barriles diarios de petróleo (bbl/d), mientras que suma 99 km3/d de gas, según la información previa que dio a conocer YPF.

En tanto, Llancanelo cuenta con las áreas Llancanelo y Llancanelo R y produce 1.818 bbl/d de petróleo y 2 km3/d de gas.

Todavía no hay información sobre el tercer clúster, Mendoza Sur, que también estaba a la venta. Desde la firma explicaron que se espera que, en las próximas horas, avancen las negociaciones por los bloques convencionales que aún continúan a la venta y forman parte del proyecto Andes.

La principal operadora del mercado informó que se avanzó con la cesión a la operadora Velitec del área Señal Picada/Punta Barda ubicada en las provincias de Río Negro y Neuquén. Y que en Chubut, la compañía PECOM continuará con el desarrollo de las áreas Escalante – El Trébol y Campamento Central – Cañadón Perdido.

En tanto, se acordó con las operadoras Bentia Energy e Ingeniería Sima, la cesión de las cuatro áreas que comprenden el clúster de Neuquén Norte.

Especial atención del Gobierno de Mendoza
YPF recalcó que, como es habitual para estas operaciones, las mencionadas cesiones se encuentran sujetas al cumplimiento de condiciones comerciales y regulatorias. Es por ello que, tras las firma de estos primeros acuerdos, la empresa a cargo de Horacio Marín elevará los mismos a cada uno de los gobiernos provinciales quienes deberán validar el proceso de cesión definitivo de las áreas.

El proceso de venta es observado con atención por la gestión de Alfredo Cornejo, puesto que afectará a la economía de la provincia, principalmente, por las regalías.

En febrero, Marín llegó a la provincia y se reunió con el mandatario provincial y la ministra de Energía, Jimena Latorre, para explicar la reforma sustancial en las operaciones de la compañía: se desharía de los activos en la cuenca norte de Mendoza para enfocarse en el petróleo no convencional que promete el yacimiento de Vaca Muerte, que tiene una lengua en Malargüe.

Se trata de áreas que son consideradas “maduras“. En el caso de Mendoza, YPF recibió más de una oferta por cada uno de los clúster.

Ahora, el Gobierno de Mendoza a través de la cartera de Latorre tendrá que emitir su opinión sobre Petróleos Sudamericanos y PCR. “Es el Ejecutivo el que decide si está de acuerdo con la opción elegida, si presenta alguna observación o si pide alguna exigencia que no esté incluida dentro de la propuesta“, explicó en su momento la ministra de Energía.

Este proceso se inició en febrero de este año con el objetivo de optimizar el portfolio de áreas del Upstream convencional con la premisa de buscar la eficiencia del capital de inversión de YPF, permitiendo a la empresa continuar desarrollando las áreas no convencionales que aportan mayor rentabilidad por dólar invertido.

A lo largo del proceso, que llevó adelante el Banco Santander, se recibieron más de 60 ofertas de unas 30 compañías nacionales e internacionales lo que demuestra el interés de la propuesta.

Se denomina “yacimientos maduros” a aquellos que ya pasaron su pico “óptimo” de producción. Para las compañías grandes como YPF no es eficiente ni rentable seguir produciendo en este tipo de áreas. Por ende, la empresa estatal decidió desprenderse de esos yacimientos, para que sean operados por PyMES u operadoras más pequeñas que puedan darle continuidad a la actividad.