Israel no da ninguna evidencia sobre vínculos entre HAMAS y UNRWA

Israel se niega a cooperar con Naciones Unidas para investigaciones que conduzcan a esclarecer si personal de UNRWA estuvo involucrada en ataques del 7 de octubre.

Israel se ha negado a cooperar con una investigación de las Naciones Unidas para despejar las acusaciones que hace el régimen sionista sobre miembros de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), respecto a que estuvieron involucrados en los ataques del 7 de octubre.

Según un informe publicado por el diario británico Telegraph, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aún no ha recibido pruebas de que el personal humanitario secuestró a mujeres y entregó armas a HAMAS para realizar ataques.

Los empleados de la UNRWA están acusados, sin prueba, por Israel de involucrarse en la operación palestina Tormenta de Al-Aqsa, mediante la distribución de municiones, el secuestro de retenidos y la coordinación del transporte.

Tras las acusaciones vertidas, Estados Unidos, el Reino Unido y varios otros países cortaron sus aportes a la UNRWA y unos días después, Naciones Unidas inició una investigación independiente para dilucidar las alegaciones de Israel.

Sin embargo, los investigadores de la ONU aún no han recibido ninguna evidencia de los israelíes, según tres fuentes con conocimiento de la indagación, a pesar de que esta semana pasaron varios días en los territorios ocupados por Israel en una misión de investigación.

La expectativa era que el equipo hablara directamente con funcionarios israelíes y aquellos involucrados en la compilación de un expediente de inteligencia que supuestamente respalde las acusaciones contra el personal de la UNRWA.

Aunque desde entonces los investigadores de la ONU han abandonado el régimen sin ninguna evidencia sustancial que respalde las afirmaciones de Israel, su trabajo continúa, dijo un portavoz, y se finalizará un informe que se compartirá en privado con António Guterres, el secretario general de la ONU.

La investigación de la ONU ha estado activa desde el 29 de enero. Antes de la misión en cuestión, los funcionarios pasaron dos semanas en Jordania, donde la UNRWA tiene su sede, entrevistando al personal y revisando las operaciones.

Chris Gunness, exportavoz de la UNRWA, lamentó que el hecho de que los israelíes no hayan proporcionado información de inteligencia a los investigadores de la ONU les haga “imposible llegar a conclusiones concluyentes”.

“En este caso, uno debe preguntarse por qué Israel no lo entrega. Si los israelíes tuvieran pruebas concluyentes de la participación de la UNRWA en los ataques del 10 de julio, la habrían entregado. Sin esto, uno se ve obligado a concluir que las pruebas simplemente no existen”.